Seis consejos para estudiantes y diseñadores de cursos en línea

Con información de El País

En fechas recientes hemos dado a conocer diversos datos que alertan sobre el alto porcentaje de deserción en los cursos en línea. En Europa, por ejemplo, la Escuela Europea de Dirección de Empresa, considera que en los estudios de posgrado, la deserción ronda el 30%, mientras que en los Cursos Masivos Abiertos y en Línea (MOOC, por sus siglas en Inglés), la deserción alcanza hasta al 90% de quienes se inscriben.

Tomando en cuenta lo anterior, desde algunosmedios se ha hecho mención acerca de lo que hay que considerar como alumno, al momento de inscribirse a un curso en línea para concluirlo con éxito. También se ha señalado lo que un buen curso online debe prever para retener a sus estudiantes.

Sobre lo que todo estudiante en línea debe tener en cuenta, destacan tres puntos:

Una buena elección: Escoger aquellos cursos en los que realmente se tenga interés, ya sea por razones personales o bien porque se adecuan al perfil profesional.

Priorizar. Al ser gratuitos se tiende a elegir todos aquellos que están dentro de nuestros intereses, pero es necesario seleccionar aquellos que mejor se adecuan a lo que se busca lograr.

Establecer rutinas. Lo cual pasa por fijar horarios para el estudio y el aprovechamiento de los cursos. Lo recomendable, aunque depende de cada curso, es dedicar 3 horas una vez por semana. “La base de la disciplina funciona cuando el curso realmente te gusta”.

Sobre lo que los cursos deben de prever, también destacamos tres aspectos:

Materiales útiles y sencillos.  Empezando porque la introducción al curso (generalmente un texto pequeño o un video de corta duración) no sea enrevesada y que explique de manera sencilla el temario, los objetivos y la forma de trabajo.

Comunicación fluida entre los participantes. Tanto el diseño del curso y cómo el papel del profesor, deben dinamizar los foros de consultas, promover la comunicación entre los participantes y mantener la información abierta el mayor tiempo posible para todos.

Inscripción flexible y siempre abierta. Es probable que una persona no pretenda finalizar un curso, pero sí estar interesada en abordar los contenidos de uno o dos módulos. En este caso un curso MOOC, debería permitir que cualquier persona se inscriba justo en el momento en que lo necesita.