Estilos de enseñanza en línea (2): El involucramiento del estudiante

En este post, continuamos la serie de tres entregas sobre los estilos de enseñanza en línea que iniciamos en este otro post.

Ahora toca el turno del estilo centrado en el involucramiento del estudiante. A diferencia del estilo centrado en la explicación, donde el docente es quien ofrece toda la información que va a necesitar el estudiante para el desarrollo de la tarea, el estilo del involucramiento se interesa en que el propio estudiante busque la información necesaria para participar en discusiones en línea con opiniones sustentadas.

Bajo este estilo de enseñanza en línea, el docente o tutor guía a los estudiantes en la búsqueda de información a través de preguntas sobre los temas a tratar. Para ello, el docente crea y modera foros de discusión en línea que involucran a los estudiantes en debates orientados a que construir respuestas a las preguntas planteadas. 

Se busca que, tanto el docente como el estudiante, mantengan una viva discusión online. Sin embargo, no se trata de discutir por discutir, sino de que la formulación de respuestas sea cuidadosamente asesorada por el instructor.

Durante el proceso, el docente en línea plantea preguntas de seguimiento que tratan de llegar a la raíz de las suposiciones hechas por los estudiantes e identificar su línea de razonamiento (ver aquí “Cinco (sencillas)preguntas para orientar al estudiante en línea”). De esta manera, los alumnos deben recoger sus propias opiniones y aprender a fundamentar con datos duros y evidencias.

También, bajo este estilo, el docente puede formular preguntas orientadas a que los estudiantes evalúen su propio desempeño o progreso. Por ejemplo, el tutor en línea podría preguntar: “¿en qué te basas para hacer tal afirmación?” o bien “¿podrías formular una respuesta distinta? Lo que se busca es que la realización de trabajos y la resolución de problemas sean producto de una construcción conjunta entre el docente (que guía) y el estudiante que plantea respuestas y aporta soluciones.

Al plantear un tema de discusión en línea, se sugiere comenzar a llamar la atención de los estudiantes a partir de preguntas generales, en lugar de preguntas enfocadas en un tema específico. Una vez que los estudiantes han respondido a las preguntas planteadas, entonces se pueden formular preguntas más específicas. Es necesario que el docente dé el tiempo suficiente a los estudiantes para pensar críticamente y participar y, sólo después de eso, ofrecer su ayuda.

En un debate en línea es importante asegurarse de que a todos los estudiantes se les permita participar en el proceso. Para ello, se pueden plantear preguntas directamente a determinados alumnos. 

El estudiante en línea debe ser reconocido por sus esfuerzos al expresar sus opiniones, de tal manera que, en el proceso, aprenda a expresar sus opiniones de manera clara, concisa y, sobre todo, apoyándose en datos y evidencias.